01 mayo 2008

OPERACION ALEGRIA



El martes fui a mi clase de cerámica.
Agarré un carrito en dirección al Silencio.
Bajé al lado de la bomba, y
caminé el borde de la carretera,
sostenida, de un lado, por los piropos de los obreros, y
del otro, por las cornetas de los carros.

2 comentarios:

Francisco Pereira dijo...

Con alegría, otra forma de ver la vida en Caracas...

Jesús Nieves Montero dijo...

y una de las pocas maneras que tiene esta ciudad para comprenderla!